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Psicología del aprendizaje y optimización del proceso educativo
El concepto tradicional de que la generación de nuevas neuronas (neurogénesis), termina después del desarrollo prenatal, en la actualidad ha cambiado, comprobandose que al menos en dos regiones del cerebro, el hipocampo y la zona subventricular, se generan nuevas neuronas a lo largo de la vida.
Tabla de contenidos
Proceso de la neurogénesis
Este desarrollo del sistema nervioso central se “fortalece” de forma muy significativa a partir de nuevas conexiones (plasticidad sináptica), más que por el agregado de nuevos elementos (neurogénesis).
El cerebro es un órgano, que se encuentra en construcción permanente y permanentemente inacabado, siempre moldeable y que constantemente se modifica, en estrecha colaboración con el ambiente. (1) Localización cerebral y cognición, pags: 198-210 de Fisiología humana de J. Tresguerres, 4º ed. 2010
La neurogénesis (generación de nuevas células nerviosas) en el adulto, conseguiría la mejora de tareas cerebrales, más concretamente tareas cognitivas, y estaría involucrada en las funciones adjudicadas al hipocampo.
Dichas neuronas tendrían un rol central en el procesamiento, almacenamiento y eventual recuperación de nuevas memorias. Los efectos de esta neurogénesis estarían mediados por factores de crecimiento que estimulan a los neurotransmisores y así mejoran el metabolismo neuronal. (2) Plasma growth factors in Neuronal regeneration. Austin J. Clin. Neurol., vol 4, Issue 3, 2017 J. Alcaraz y Antonio G. Oliver
Este proceso de neurogénesis que realizamos durante nuestra vida, podemos mejorarla o retrasarla, según nuestro estilo de vida en alimentación, ejercicio, mente y espíritu.
De esta manera, alimentos antioxidantes como la cúrcuma, el apio, el brócoli, las nueces y las grasas saludables la mejoran; y son negativos el alcohol, tabaco y azúcar. Con respecto a la actividad física, ejercicios que incrementen el gasto cardiaco.
¿Podemos seguir aprendiendo con el paso del tiempo?
Una calidad de vida, con un sueño apropiado, con la música, el silencio, sentimientos positivos como el sentimiento del amor, que la estimulan a través de la secreción de la hormona oxitocina; y por supuesto evitar el estrés, la ira, la ansiedad. Así es importante cómo manejamos nuestras emociones y nuestros sentimientos, que van a ser positivos o negativos para nuestra plasticidad neuronal.
Las emociones positivas y la mejora de la plasticidad cerebral está demostrado en numerosos estudios que determinan un aumento de volumen en la corteza cerebral, potenciando la atención selectiva, y esto se conseguía en cualquier edad, con una participación activa del sujeto, pero se necesita dedicación, esfuerzo y perseverancia.
La visualización de la actividad cerebral a través de las técnicas de neuroimagen ha permitido a los expertos bucear en la masa gris y conocer de forma directa cómo funciona el proceso de aprendizaje y la necesidad de replantearse el proceso de enseñanza-aprendizaje para hacerlo más eficiente. Para ello, se propone aplicar técnicas y metodologías avaladas científicamente por la neurodidáctica. (3) El cerebro necesita emocionarse para aprender. T. Muñoz – www.el confidencial.com./sociedad/2019/04-29 (Santander)
La neuroeducación y la estimulación multisensorial
La neuroeducación pone en evidencia que el camino adecuado para conectar con los alumnos y alumnas es “la estimulación multisensorial para avivar su curiosidad”. Todo indica que el objetivo final ha de ser, precisamente, fomentar la motivación de los jóvenes. Por eso el docente debe conseguir transmitir los contenidos de una forma atractiva. “El cerebro necesita emocionarse para aprender” y para ello hay que generar deseo. “Es fundamental producir un neurotransmisor llamado dopamina que es el encargado de activar las funciones ejecutivas”.
La capacidad del aprendizaje es importante y podemos mejorarla a lo largo de nuestra vida, dos aspectos que nos pueden ayudar son; las emociones agradables, que hacen que nuestra memoria sea efectiva, y en segundo lugar los deseos de aprender, que hacen que la motivación consiga sus objetivos.
La confirmación científica de que no se deja de aprender en toda la vida, ya que siempre se pueden crear nuevas conexiones neuronales, a través de la plasticidad cerebral, es exacta. Para conseguirlo en la Enseñanza del aprendizaje, se apuesta por la gamificación como estrategia motivadora.
La Gamificación como técnica de aprendizaje
La Gamificación es una técnica de aprendizaje que traslada la mecánica de los juegos al ámbito educativo-profesional con el fin de conseguir mejores resultados, ya sea para absorber mejor algunos conocimientos, mejorar alguna habilidad, o bien recompensar acciones concretas, entre otros muchos objetivos.
El profesor Espinosa puntualiza que “gamificar no es jugar”, y añade que la verdadera gamificación consiste en que el proceso de enseñanza-aprendizaje tenga “aspecto de juego”, sin serlo realmente, con el objetivo de “potenciar los procesos de motivación” a los que hace referencia la neurodidáctica.